El Danubio, el segundo río más largo de Europa, serpentea a través de Viena, ofreciendo pintorescas vistas y actividades de ocio. Desempeña un papel fundamental como arteria crucial para el transporte, uniendo Viena con otros destinos europeos. Además del curso principal del Danubio, Viena cuenta con el "Viejo Danubio", una cocha formada a partir de una antigua curva del río. La ciudad está surcada por una extensa red de canales, entre ellos el canal del río Wien, históricamente fundamental para el transporte de mercancías a Viena. Cada año, el "Festival de la Isla del Danubio" atrae a multitudes por su vibrante celebración musical a orillas del río. Además, la gestión del agua en Viena incluye canales artificiales como el arroyo Wienerberg, diseñado para regular el flujo de agua y frenar las inundaciones en la ciudad.
Las rutas más comunes incluyen viajes a lo largo del río Danubio, descubriendo el pintoresco Viejo Danubio y atravesando el intrincado sistema de canales de Viena.
La duración del crucero puede variar en función de su naturaleza. Las excursiones turísticas breves suelen durar alrededor de una hora, mientras que los relajados cruceros con cena pueden alargarse varias horas.
Algunos cruceros ofrecen comidas, aperitivos o bebidas. Es aconsejable consultar al operador turístico para conocer las opciones de restauración.
Los operadores de barcos cumplen estrictamente los protocolos de seguridad, garantizando la disponibilidad de chalecos salvavidas, procedimientos de emergencia bien establecidos y personal competente. Antes de la salida se suelen dar instrucciones de seguridad.