TorreEiffel

Torre Eiffel, Paris

Disfrute al máximo de este icono parisino con las entradas y visitas a la Torre Eiffel. Construida originalmente como exposición temporal para la Exposición Universal de 1889, la Torre Eiffel se erige como la estructura más significativa. Afortunadamente, la instalación de Gustave Eiffel sobrevivió a su vida útil y todavía adorna el horizonte parisino. No puede visitar París sin visitarla, pero puede evitar las largas colas con las entradas sin colas para la Torre Eiffel. Combínelo con un deslumbrante crucero por el Sena o con cualquier otra aventura que elija.

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Nuestros consejos para Torre Eiffel

  • Pensar por adelantado. Las colas para acceder a esta torre son muy largas. Ahórrese molestias y tiempo con las entradas para el ascensor o las escaleras de la Torre Eiffel.
  • Coge un guía. Acceda a la habitación secreta de Gustave Eiffel en la cima con una visita guiada que le garantizará una visita encantadora.
  • Pisa a fondo. Suba por las escaleras de la Torre Eiffel para evitar los largos ascensos en ascensor. Además de ponerte en forma, podrás detenerte en cualquier punto del ascenso para contemplar las vistas desde ángulos muy diferentes.
  • Trae gorro y guantes. El tiempo en el suelo será mucho más cálido que en lo alto de la torre, así que no olvides abrigarte para mantener a raya el frío y el viento.
  • Cena en la cima. Cenar en lo alto de la torre es la mejor manera de disfrutar de las vistas panorámicas de la ciudad iluminada.

Conviene saber

También conocido popularmente como La Dame de Fer (o La Dama de Hierro), el monumento de celosía de hierro forjado se convirtió en una sensación inmediata cuando se abrió al público a finales de la década de 1880. ¡Quién iba a pensar que el diseño que en un principio se consideró poco favorecedor alcanzaría la prominencia y se convertiría en la estructura más icónica de la historia de la humanidad!


La torre homónima de Gustave también incluye su apartamento secreto, que no debe perderse en su visita a la Torre Eiffel. Cuenta la leyenda que en él se alojaron personalidades de la época como Thomas Edison. En 1944, Hitler ordenó a su ejército demoler la torre, pero el gobernador de París, Dietrich von Choltitz, se negó.


Aunque la Torre Eiffel es resistente al viento, se balancea hasta 7 cm en su cúspide. La torre tiene una bonita y funcional oficina de correos. Desde allí se puede enviar correo, que se entregará con un matasellos único.


La torre fue en su día un observatorio y laboratorio meteorológico donde Gustave Eiffel realizaba observaciones astronómicas, experimentos físicos y estudios aerodinámicos.

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